Dos luchas contra basureros: que Laureles cierre, y que Tala no abra

Nadie quiere tener un basurero como vecino.

Pobladores de El Salto, Juanacatlán y Tonalá y de otros municipios metropolitanos han alzado la voz para que por fin, se cierre el vertedero Los Laureles que recibe a diario 3 mil 500 toneladas de basura del Área Metropolitana de Guadalajara.

Desde 1991, pobladores que viven cerca a este basurero sufren de la contaminación que causa: malos olores, desprendimiento de gases, lixiviados, mala imagen y afectaciones a la salud.

Después de casi 30 años de actividad, el Gobierno del Estado anunció en 2019 su cierre definitivo en "un plazo máximo de 24 meses", pero recientemente el mismo Gobierno se contradijo, argumentando que hubo una "mala lectura de la información" y que el proceso de cierre apenas comenzaría en septiembre del 2021.

Al mismo tiempo, se dio a conocer que se construye un nuevo vertedero metropolitano, que tendrá sede en el municipio de Tala, que sustituirá a Laureles.

Habitantes de aquel municipio también han salido a las calles a manifestarse en contra del basurero. El ejemplo de lo que ha pasado con Laureles los ha hecho prender las alarmas e intentar no repetir la historia.

El Gobierno de Jalisco ha dicho que es una nueva época de gestión de residuos y llevará el nombre de “Centro Integral de Economía Circular”, pero será también operado por Caabsa Eagle, empresa a la que no le ayudan sus antecedentes con las prácticas en Laureles.

Hay dos frentes abiertos: los que quieren que por fin cierre Laureles y los que quieren evitar que se abra otro vertedero en Tala.

Nadie quiere tener un basurero como vecino. ¿qué modelo de gestión de residuos se debe implementar? ¿a qué lugar debe de ir nuestra basura?