Pilares históricos

Entrando a Juanacatlán y a pocos metros del puente que une a este con El Salto, quedan aún de pie los restos de dos pilares que por su pésima condición llegan a pasar desapercibidos por la mayoría de las personas que transitan por la calle, desconociendo de qué se tratan o qué valor y/o significado tienen.

Estas piezas surgen como parte de los trabajos para la construcción del primer puente que uniría a Juanacatlán con la entonces Colonia Obrera de Río Grande. El Ingeniero, Jorge Villaseñor, encargado de la obra, proyectó dos pares de columnas conmemorativas que fueron dispuestas en ambos extremos del puente. En el remate de las primeras estaba inscrita la fecha en que inició y concluyó el puente – 1898-1901-, mientras que en los otros dos se indicaba el nombre del promotor de la obra; el padre Vicente Michel Vizcaíno.

Fueron realizadas con cantera gris y formadas por un conjunto de cuerpos cuadrados, a manera de fajas estriadas. La base muestra una gran flor mexicana envuelta con ornamentación vegetal que se extiende en el pedestal. Continúa el cuerpo del pilar que termina con un capitel adornado con flores de alcatraz y coronaba todo el conjunto un trofeo con tres palmetas al centro y un elemento floral que se abría a lo alto.

Tras las mejoras realizadas al puente en 1970, las columnas de ingreso fueron retiradas quedando su zócalo y basa ocultas en el concreto. Con la reconstrucción de un tramo del puente en 2007 estas partes se rescataron, pero se desconoce a donde fueron a dar. El otro par no sufrió daños mayores sino hasta el accidente provocado por un automóvil que causó el desplome de una columna quedando solo una sección de pie. El otro pilar fue restaurado en 1998 siguiendo el mismo modelo de diseño excluyendo el trofeo, todo esto con motivo del centenario del municipio.

Queda demás decir que es necesario preservar y restaurar lo poco que queda de estas pequeñas, pero no menos importantes piezas históricas, pues son uno de los pocos elementos civiles del siglo XIX que tenemos y en ellas yace buena parte de la historia del pueblo que, si no se mantiene en la memoria colectiva, puede estar en riesgo de desaparecer.

OTROS TIEMPOS...las columnas tienen más de 100 años en el puente que une a El Salto y Juanacatlán.

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