Apatía, un estado de indiferencia

Cada vez que una persona externa, visita nuestro municipio, el río Santiago, a pesar de su estado actual de descuido (o incluso debido a esto) genera en ellos una profunda impresión, dando motivo a manifestaciones y activismo ecológico.

Sin embargo, todas estas acciones y fascinación de visitantes no hacen eco en muchos de los habitantes de Juanacatlán. Nuestro pueblo presenta una gran indiferencia que lamentablemente se esparce como una enfermedad desde años atrás.

Nuestros dirigentes políticos no han hecho más que cansar el espíritu del pueblo, mientras que el sistema educativo no va más allá del plan proporcionado por la Secretaria de Educación Pública en cuanto al cuidado al medio ambiente, o la formación de estos valores, que atiendan las necesidades culturales del pueblo.

Esta combinación de factores, aunado a la falta de recurso o apoyo municipal o cualquier otro tipo, merma el interés y capacidad popular para llevar a cabo acciones o propuestas de mejora de la comunidad.

Volviendo al tema de la educación, actualmente se tiene la idea incorrecta que ésta responsabilidad corresponde únicamente a los profesores y olvidamos que una parte fundamental y básica de nuestra formación, la cual se recibe en el hogar y no sólo eso, sino que todos tenemos parte en la educación de aquellos con quienes convivimos, pues una buena forma de aprendizaje se da por imitación, al seguir el ejemplo de otros.

Si todas las personas se propusieran presentar un cambio (por más pequeño o mínimo fuera) que las beneficiara a ellas mismas y a su comunidad, con el tiempo tendríamos una mejora en todos los ámbitos que nos llevaría como resultado lógico a tener una mejor calidad de vida.

El proyecto “Este es mi río Lerma Santiago” es un proyecto de participación ciudadana donde todos pueden participar de diversas formas y se espera que surjan más propuestas o proyectos en pro de la comunidad.

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