Un milagro llamado Berna
El joven de 20 años sufrió un grave accidente en moto que le cambió la vida y ahora, él y su familia quieren que su experiencia sirva para concientizar a motociclistas
“Mamá, te amo mucho”
Esas palabras pueden iluminar el rostro de cualquier madre, pero para Martha Flores significaron mucho más que una declaración.
Su hijo Berna Ochoa, a sus 19 años, había sido pronosticado a quedar en estado vegetativo después de sufrir un accidente de moto en Juanacatlán, el pasado mes de marzo.
“Tuvo golpes muy fuertes en el cerebro, se le inflamó demasiado y tuvo golpes internos en los pulmones”, recuerda entre lágrimas la habitante del Infonavit La Mesa.
“’Mamá, te amo mucho’, fueron las primeras palabras que dijo después de varios meses de no hablar, de no moverse, fue una gran felicidad, porque me lo habían diagnosticado que podía quedar en estado vegetativo”.
El 27 de marzo pasado, Berna salió a una fiesta a Juanacatlán y pidió prestada una moto para llevar a un par de amigas a sus casas. Después de dejarlas, fue embestido por un automovilista, arrojándolo varios metros y dejándolo en estado grave.
Berna no portaba casco, lo que pudo haber cambiado su historia.
“Tengo tres ombligos”, interrumpe Berna la entrevista con su madre y entre risas hace relación a las cicatrices que le quedaron por la entubación a la que tuvo que ser sometido.
Berna no se acuerda nada del accidente, pero su recuperación ha sido impresionante y en palabras de su madre y algunos médicos, su caso ha sido todo un milagro.
“Estuvo dos meses hospitalizado, me lo traje inconsciente, no hablaba, tenía sonda para darle de comer”, recuerda su madre.
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“Gracias a Dios, mi hijo aquí está, pero duró tres meses inconsciente, no reaccionaba, ahora él ya camina solo, se baña, se viste solo, ya hace muchas cosas”, indicó.
Berna no deja de sonreír y de abrazar y besar a su madre, quien no puede contener las lágrimas por el recuerdo. Su vida cambió en un instante y ahora, él y su familia quieren que su experiencia sirva para que los motociclistas y automovilistas de El Salto y Juanacatlán tomen conciencia sobre la cultura vial y de seguridad.
El joven cumplió 20 años el 15 de diciembre, es graduado del Conalep como Técnico Industrial y antes del accidente trabajaba en Corey, como técnico en mantenimiento.
“Quiero seguir estudiando, me gusta mucho ser técnico industrial”, afirma Berna mientras su madre lo mira con ojos llorosos y el alma esperanzada.
FRASE
“Es algo tan doloroso, se te cierra el mundo, sientes que tus puertas se te cierran, mi hijo apenas comenzaba a trabajar, tenía 4 meses, salió el Conalep como Técnico Industrial y él quería ser ingeniero”
Martha Flores, mamá de Berna
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