Cuida tu peso sin traumarte
Un peso saludable no es un número específico para todos, es un rango basado en muchas cosas, incluyendo genes y estilo de vida
La mayoría de las mujeres viven comparándose con las demás; la chica que hace ejercicio, la mamá que deja a sus hijos en la escuela, la compañera de trabajo que siempre luce espectacular. Son muchos tipos de cuerpos…
Sin embargo, sólo puedes tener uno, y el peso depende de ti, no de los demás.
Y vamos a ser sinceros, la palabra “peso” es todo un tema. Si siempre has luchado con esos kilos de más, seguro pensarás que entre menos tengas, mejor, pero no puedes saber exactamente eso por tu cuenta… y mucho menos con la ayuda de un espejo o una báscula. Así que regresamos a la pregunta original: “¿cuándo debería pesar?” Como mujer la respuesta es: “¿entro en ese vestido que tanto me gusta?” o “¿mis brazos están más tonificados que los de ella?”
El tema del peso se convierte en un juego de números, cuando no debería de ser así.
Es un rango
Un peso saludable no es un número específico para todos, es un rango basado en muchas cosas, incluyendo genes y estilo de vida.
Adicionalmente existen tres tipos de cuerpo: grande, mediano y chico, y entre esas categorías hay subgrupos. Aunque sea cierto que la báscula te dará un nombre de alerta (o todo lo contrario), estar bajo de peso o sufrir de obesidad es un problema válido y ambos pueden tener efectos hacia la salud a largo plazo. Y en algunos casos, tu peso podría ser señal de algo que sucede con tu cuerpo, pero, ¿cómo saberlo?
El cambio de peso no necesariamente es algo malo. De repente peso 60 y luego 65 y me pongo a buscar dietas como loca. ¡Basta! Las dietas rápidas no sirven, y es posible que ni siquiera las necesites. Un peso saludable cambia constantemente.
Existen cambios hormonales que suceden a los 30, después del embarazo, en la adolescencia y otros aspectos de la vida que causan un impacto significativo. Pero hablo de cambios pequeños.
Si empiezas a bajar mucho de peso sí hay un problema. Si puedes activarte estás bien. No me refiero a que puedas hacer una clase de “crossfit” sin sudar, sino de que puedes moverte y ser ágil.
Si notas que tu movilidad se ve limitada, podría ser señal de un problema de peso. Por ejemplo, si antes corrías 15 minutos sin problemas, y ahora te agitas al subir 10 escalones, tu peso podría estar causando más problemas a tu salud de los que te imaginas. Habla con tu doctor.
Información: El Universal
