Centenario textilero: Club Occidente cumple 100 años
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El Club Deportivo Occidente cumplió este 6 de mayo, 100 años de su fundación.
De Atemajac, los aurinegros tienen una historia muy parecida a clubes como el Río Grande de El Salto y el Imperio de la Experiencia: surgieron de una Fábrica Textil a principios del siglo 20 y fueron una gran cantera de futbolistas, muchos de ellos destacaron en el futbol profesional y representaron a México en mundiales.
También, tanto en Atemajac, La Experiencia y El Salto se crearon colonias obreras, conocidas como "Las Cuadras".
Hoy el Occidente llega a su centenario, atravesando una crisis desde hace años, que lo tiene al borde de la desaparición, ya que gran parte de sus instalaciones fueron vendidas por socios del sindicato de la ya desaparecida Fábrica Textil de Atemajac.
En pasado sábado festejaron su centenario en una sede, que no fue Atemajac.
CLUB DE PROSAPÍA
De las filas de los aurinegros, como son conocidos por sus colores, surgieron tres jugadores que fueron campeones con el Atlas en 1951 y de sus últimas figuras surgidas del Club fueron Paulo César “Tilón” Chávez y Juan Pablo “Chato” Rodríguez, ambos bicampeones del futbol mexicano y selecciona-dos nacionales.
Fue en el año de 1919 cuando un grupo de trabajadores de la fábrica textil de Atemajac fundaron el Club Osiris con apoyo económico de los obreros y de la misma industria, pero fue hasta 1921 cuando se le dio el nombre de Occidente, por la región geográica en la que se ubicaba. Desde su nacimiento, el club se sustentó con las cuotas de los trabajadores sindicalizados, pero el problema inició cuando en 1992 la fábrica estalló en huelga.
Algunos jugadores que han surgido del Club Occidente a la Primera División son Jorge Rodríguez, Antonio “Niño” Flores, Juan “Chapetes” Gómez, José “Chivo” Mercado, Felipe Velázquez, Francisco “Panchito” Flores, Fausto Vargas, Sigifredo Mercado, Fernando “Pollo” Salazar Paulo César “Tilón” Chávez y Juan Pablo “Chato” Rodríguez.
TEXTILEROS
Cuando se instalaron en la Ciudad las fábricas textiles de Atemajac (1843), La Experiencia (1851) y Río Grande, en El Salto (1896), le dieron vida a estos poblados y los trabajadores ingleses, franceses y escoceses que vinieron con ellas les enseñaron a los jaliscienses del aquel entonces lo que era el futbol.
Ya con el Club Unión (hoy Club Guadalajara) fundado en 1906, El Nacional, en 1915, y Atlas, en 1916, surgieron estas instituciones con ayuda económica de los trabajadores y de los dueños de las textileras.
El génesis de los jugadores de estos clubes fue en las pequeñas cuadras de tierra de las colonias industriales de estos pueblos y dieron sus primeras patadas a pelotas de hilo hechas con material de la fábrica textil para después enrolarse en los equipos.
Rápidamente aprendieron los jugadores de estos equipos y al poco tiempo las primeras oncenas ya se enfrentaban en torneos oficiales al Guadalajara, el Atlas, el Nacional y el Oro, ganándose respeto poco a poco.
Ahí se creó el llamado Clásico de los hilanderos. Cuando estos equipos se enfrentaban entre sí, muchos de los partidos terminaban en broncas.
En la antesala de la época profesional varios jugadores tuvieron el privilegio de pertenecer a la Selección Jalisco que participaba en la Liga Mayor amateur en la Capital del País. Cuando inició el profesionalismo en el futbol de México, en 1943, El Imperio, el Occidente y el Río Grande jugaban los preliminares de los juegos de las Chivas, el Atlas y el Oro.
